Parcial
Este proyecto es una respuesta a la falta de empatía que encuentro en la sociedad.
Presento diversos pensamientos, los cuales yo considero son irrelevantes y están aislados, ambos por parte de la sociedad.
Muestro esta visión contemplativa queriendo provocar cierto alivio en las mentes turbadas, que el espectador no se sienta solo, y que este se sienta acogido con el proyecto. En caso el espectador no se sienta relacionado con este, hacer llegar la idea de que quiero evitar la necesidad de suprimir emociones ya sean del propio individuo como del resto.
Cuentos
#1
2009
Lou comía lentejas mientras Ella
fumaba. Sin mirarlo, solo te miraba a ti, porque le estorbas. Ella vestía de
azul, él se desvestía y comía lentejas. ¿Está de más decir que estaba
desempleado?
Eran creyentes, creían en Susy,
Santa Susy, ella era la encargada de la manutención de su sofá, que para ellos
fue carísimo conseguir.
Rita es hija de ambos, es buena,
pero tiene el carácter de la madre, dormía con su camisón de la tatarabuela de
los años 20 que olía a vainilla y a cigarrillos, no porque así oliera la
tatarabuela, Rita fumaba y era diabética.
Con 14 años era una chica solitaria
en su habitación, porque solo miraba al techo como esperando a que algo suceda.
Desgraciadamente nada más sucedía. Hasta que este ser llegó.
Marlo es el novio de Rita, en este
momento está esperando a que le tomen una foto para su mamá, vive en Austria,
nunca la ve, pero él tiene que estar presentable y muy bien para ella. Hay que
portarse bien.
Sino ¿cómo espera complacer a su
madre ausente?
Rita y Marlo deciden irse juntos, ya
sea en bus, caminando, o en el auto de Ella, que se lo ofreció a Rita porque
quiere que se vaya. Muy lejos si es posible. A Rita no le importó que la bote,
mejor, así dejaría de esperar a que algo suceda y lo que sucedería a continuación
será su vida.
Ella y El peleaban un día soleado
por la ausencia de Rita, pero la pelea para porque escuchan un golpe afuera.
Había una caja, firmada por ¨tu amor¨. Nadie
sabe quién es, lo único que sabemos es que estaba para reventar esta historia.
No sabemos cómo, pero estén seguros que será algo malo.
#2
Había fresas azules en la
refrigeradora, eran de Salla, nadie debía tocarlas.
Era Semana Santa, su semana, porque
era hija única y sus papás la amaban.
El viernes quiso salir a caminar,
era un viernes solitario, como de costumbre.
Zapatos cómodos, una sombrilla
verde, su falda favorita y sus audífonos rotos, veía a toda la gente pasar y
solo se sentía más sola.
Volviendo a la casa se da cuenta que
no llevaba su llave, así que no tuvo mejor idea que irse, era viernes 2 de
abril, pero no era un viernes cualquiera.
Ella trabajaba mientras Él hacía las
compras de la casa. Ella sube al auto, prende la radio, sonaba su canción
favorita de reggae mientras iba a darle el encuentro a Él. Él la mira y se
enamora de nuevo.
Al llegar no la encontraron y se
preocupan, la llaman, la buscan por todo lado, nada.
Decidieron llorar, y nadar en sus
lágrimas.
Domingo 4 de abril.
Abre los ojos porque había un gato
lamiéndole el rostro, le da besos, de esos que no le gustaba recibir.
Se vuelven amigos y desde entonces
son
Salla y Nano, dos amigos que la vida
había juntado por ninguna razón.
Buscando en el auto la encuentran, a
dos cuadras de la casa, no estaba sola.
Alcanzaron a darles un abrazo, una
manta y sus fresas azules para verla feliz, y lo estaba, pero no por las
fresas.
#3
-¨Si
tenemos el recuerdo de que algo pasó podría ser porque realmente pasó o porque
nuestra mente juega con nosotros y nos quiere hacer mentir, para divertirse
quizás, porque mi mente puede tener su propia conciencia, y podría tener alguna
clase de problema, o quizás soy yo que estoy mal, no creo, o fácil sí, porque
mi mente es mía, pero yo dependo de ella, entonces ella decide. ¿Significa que
aparte de ser controlado por mis padres, mis amigos y esta sociedad, me
controlan mis pensamientos? Que podrían no ser míos, porque mi mente es la
dueña de estos.
Yo
no soy el problema, es ella.
Yo
soy inocente¨
Estas fueron las palabras de Martín, un
veinteañero que estaba marcando los días con líneas en la pared de su celda de
la cárcel por haber matado a su mujer por haber querido quemarlo vivo. O eso es
lo que su mente le dijo.
-De
repente llega Luciana, su hija.
Le
deja una flor y una nota que dice ¨te quiero¨ en el piso de su celda. Se va.
-Los
cuidadores del lugar miraban asustados mientras realizaban sus actividades de
todos los días. Así esto pasara todos los días, estos seguían asustándose.
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